Juguemos en el blogsque...

Bueno, vamos a aclarar algo desde el comienzo del post. Soy yo, M. y estoy enferma... y con fiebre, asi que si leen incoherencias inusuales (vale aclarar), ya saben por qué es...

P. me dijo "fijate de hacer eso del juego, asi de paso safamos de hacer un posteo". Yo dije "de que juego hablas, cocainomano del tujes?!". El me dijo "LEE EL BLOG DE VEZ EN CUANDO, PERRA". A lo que respondí "ah bueno... ahi me paso, PERO CALMATE PORQUE TE DOY UN BIFE JOSE EUSTAQUIO DEL MONTE!".

Mas tarde me dijo "fijate, si no tenés ganas fue...". A lo que le dije "Nah, yo lo hago... total soy la única que da la cara en materia de intimidad en este blog!!!". Él me gritó "VES QUE SOS UNA DRAMA QUEEN!!!". Yo le dije "CALLATE ZORRA, POR LO MENOS LAS MÍAS SON REALES!!!". Y ahi empezamos una pelea de gatas loca loca.

Ok, por ahi lo flashee... pero algo así fue. En fin, aquí nuestro (MI) aporte al juego...

Las reglas del juego:

1. Cada jugador cuenta 8 cosas de sí mismo.
2. Además de las 8 cosas tiene que escribir en su blog las reglas.
3. Por último tiene que seleccionar a otras 8 personas y escribir sus nombres y sus Blogs.
4. Por supuesto, no hay que olvidar dejarles un comentario: que han sido seleccionadas para este juego.

Mis 8 cosas (no, no suena feo ni en pedo...):

1.- Hablando de sonar feo... Como muy rápido. Y por lo general no tomo mientras como, me estorba. Y usualmente tampoco mezclo cuando como... es decir, si hay bife con ensalada, primero como el bife, después la ensalada. En 5 minutos terminé de almorzar o cenar. Cuando era bebé, comía tan rápido que me atragantaba y me salía leche por la nariz (que, también suena feo?). Mi abuelo siempre estaba a los gritos: "Se ahoga!!! se ahoga!!!". Pero no. Simplemente como rápido... Ojo, el desayuno y la merienda me lleva largo rato. Será la onda ritual... hay que untar cada tostada... esperar a que se enfrie el té... cebar el mate... Es otra cosa.

2.- Me encanta pasar días fuera de mi casa... irme de viaje, de excursión o vagar de casa en casa (de amigos, tampoco la pavada...). No porque mi casa sea horrible, o me lleve mal con mis padres. Simplemente me gusta irme y que mi mundo se reduzca a una mochila... De hecho, de niña soñaba muy seguido con que tenía que armar una mochila o un bolso, tratar de meter ahi adentro la mayor cantidad de mis cosas posible, e irme lejos lejos lejos... Los por qués variaban, pero el objetivo era siempre el mismo, huir. La sensación de tener la vida en una mochila es algo que me fascina a la vez que me aterroriza.

3.- Los libros finitos me desalientan a la hora de leer. No me atraen en absoluto... Los leo igual, obviamente... el ser finitos no les quita la belleza interna ni mucho menos (Los Pichiciegos, de Fogwill, El baile de las locas, de Copi o La boda de Hitler y Maria Antonieta en el infierno, de Wilcock figuran de hecho en mi lista de favoritos). Pero no me atraen... En cambio un libro gordito, sentado en el estante, me incita a que lo lleve en mis brazos y lo lea por horas. La sensación de infinitud es lo que me atrae... Odio los límites.

4.- Vivo en puntos medios, en la teoría. En la práctica, paso de un extremo al otro. Simple.

5.- Cuando no puedo dormir (por x motivo), leo las obras completas de Poe. Me relajan... Así como In Utero, de Nirvana, era mi cd de cuna cuando era más pendeja. Si me habré dormido con Kurt gritándome "rape me" en mis auriculares...

6.- Hace unos años que empecé a notar que mi memoria falla horriblemente. Pero fundamentalmente se reduce a dos focos principales... Primero, me olvido cosas que iba a decir en el momento (cosas importantes) y me las acuerdo minutos, horas, días, semanas después. Hace unos días de hecho recordé dos frases que un amigo me dijo hace mínimo 5 años. Las conecté y comprendí muchas cosas recién entonces... En su momento no les di bola, y luego las olvidé. El martes pasado las recordé. Curioso... Segundo, me olvido los finales de las películas. Puedo recordar fragmentos enteros, pero los finales son algo que siempre escapa a mi registro. Igual, no me quejo... las puedo volver a ver sin perder la magia. (?)

7.- Duermo con sábana, dos frazadas, acolchado, manta polar y poncho en los pies. Pero en musculosa y a veces short piyama... nada más. Me gusta la sensación contradictoria de libertad que eso produce. Estoy libre de ropa molesta, pero aplastada por mantas. Es como estar desnuda en una cueva (?!). Además, disfruto muchísimo sacar los brazos, calientes por el efecto cueva, por encima de las mantas y que sientan el aire frio. A su vez, detesto dormir con aire caliente circundando mi cara. Dormir acurrucados es divino, jamás diré lo contrario. Pero por favor, no me respires en la cara. Cucharita y a otra cosa.

8.- Porque odio los límites, prefiero salir a caminar por capital, a salir a patear la calle de mi pequeño pueblo del Gran Buenos Aires. Además, la homogeneidad me da por las pelotas, lo heterogéneo la rulea, y qué mas heterogéneo que la ciudad? Igual el campo y la montaña son gloriosos. Ah, me olvidaba: soy indecisa. Y segura. Indecisamente segura. Ahí está...

Hasta acá llegó mi amor. Y mi fiebre... Cama he dicho...

PD: Ah, y le paso la posta a los siguientes personajes:
Señorita Sortilegios
Señorita Fontalva
Dos en una
Marie
Arwen
Lauruguacha
Gatito
Conclusiones Profundas

M.